Proyección del Estreno Mundial Oratorio “La Santa Furia” Del compositor mexicano César Tort (1925-2015).

El próximo miércoles 5 de septiembre a las 12:00 hrs. se llevará a cabo en el Colegio Madrid, la proyección del estreno póstumo del Oratorio “La Santa Furia”, del compositor y pedagogo musical César Tort.

Este estreno tuvo lugar en el Palacio de Bellas Artes, con la Orquesta Sinfónica Nacional en el mes de febrero del presente año. El Oratorio La Santa Furia a Fray Bartolomé de las Casas es una obra en la que César Tort trabajó durante los últimos años de su vida.

César Tort también fue autor de diversas obras: Sinfónicas: Estirpes, La Espada, La Santa Furia; corales: Alba Misa; música de cámara: Junto al genil, Flor que llora, Un mundo sutil, Volved a hablar, La comedia, El jardín de Lindaraja, etc.; piezas de piano: Suite Breve, Homenajes, El Orador, El Carnaval, Loto, Intermezzo, Ístmica, entre otras. En 1967 Tort ingresó a la UNAM como investigador de tiempo completo en el campo de pedagogía musical infantil, lugar donde dio forma y origen al Método de Educación Musical Infantil que lleva su nombre, método basado en ciertas tradiciones de la lírica infantil y el folclor de México. Además, el maestro Tort, adaptó para esta tarea instrumentos vernáculos y de origen precolombinos. Tanto sus obras sinfónicas como su música de cámara han sido interpretadas en Estados Unidos de América y en México por importantes orquestas y ensambles de cámara.

El Oratorio de “La Santa Furia”, está inspirado en la figura de Bartolomé de las Casas, quien defendiera en el Siglo XVI ante autoridades civiles y militares de la época, los derechos de los indígenas de México y Sudamérica. “La Santa Furia” es una obra sinfónica para solistas, coros, orquesta, un narrador y proyecciones, el guión del Oratorio fue escrito por Jesús Puebla, dividida en cinco partes:

• I Canto a la Raza Profunda

• II Las Cosas Indianas

• III Vocación

• IV El Mundo

• V Génesis, El Nuevo Mundo

PALABRAS DEL MAESTRO CÉSAR TORT: Bartolomé es uno de los grandes promotores del humanismo. Nadie antes que él había hablado de derechos humanos. Nadie antes que él –sólo Jesús, fundamento de Bartolomé- había pregonado que la humanidad era una. Nunca, hasta Bartolomé, se habían escuchado voces como: “Las razas no existen”, y añadía: “son juicios irracionales de mentes ensoberbecidas y fatuas”. Sabemos que su obra influyó en reyes, modificó las leyes de Indias, e incluso terció en bulas papales. Rescatar el resplandor de este insigne sevillano ahondando en su vida y su obra, es poder contar en nuestros días con un inmune e inapreciable factor de conciliación.

Evento interno.
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