Jugando con la presión atmosférica en Secundaria y CCH

Muchas veces cuando se habla de cultura, se suele dejar a la ciencia como un elemento externo a ella, a pesar de que es una parte de nuestra vida diaria, y precisamente por esa razón normalmente no nos percatamos de su presencia. Desde el simple acto de respirar, inflar un globo, medir la presión de las llantas de nuestro auto, hasta cuando vamos a una cafetería, solicitamos una bebida y le ponemos un popote para sorber el líquido, podemos asegurar que se encuentran presentes varios principios que son estudiados en el ámbito científico, ya sea desde la biología, la química o la física.

Y una manera de poder hacerlos explícitos es a través de actividades que hasta pueden ser divertidas. Como lo hicieron alumnos de CCH y de Secundaria al retar a la presión, tratando de beber agua con un popote, pero ¿dónde está el reto?. Que la botella con agua se encontraba a nivel del patio de la escuela y ellos debían usar un popote que llegaba al segundo piso; es decir, debían poder beberse el líquido desde una altura de aproximadamente 7 metros. Algunos casi lo lograron, otros se quedaron pensando en mejorar su capacidad pulmonar.

Esta actividad además de soltar varias sonrisas, caras rojas, y ver qué tal funcionaban sus pulmones, hizo que algunos se cuestionaran si esto era posible, y si era así ¿existe una altura límite para poder lograrlo?, ¿cuál?, ¿hay forma de poder superar ese límite impuesto por la naturaleza?. Preguntas que, algunos alumnos, llevaron a sus clases de física para poder responderlas además de contar, así como cuestionar, nuevas anécdotas que viven todos los días sobre la presión atmosférica, una compañera inseparable.