Un día para recordar siempre
Hace algunos días los grupos de segundo grado nos fuimos de campamento. Todo fue muy emocionante y divertido.
Nuestro paseo inició desde que llegamos al colegio y aunque el día estaba lluvioso, los consejeros de Ícaros y las maestras ya estaban ahí para organizarnos. Subimos al camión y nos sentamos con nuestros mejores amigos, todos estábamos muy contentos y a pesar de que había mucho tráfico, el camino nos pareció muy corto.
Cuando llegamos, vimos un lugar muy bonito con muchos árboles y pasto. Los consejeros nos pidieron que dejáramos nuestro equipaje para después comer pues ya teníamos mucha hambre. La sopa y los taquitos dorados estaban deliciosos, mejor que los que prepara mi mamá. Más tarde, jugamos mucho, cenamos delicioso e hicimos una fogata. La noche estaba obscura y silenciosa, después nos dio sueño y nos fuimos a dormir.
Al día siguiente, nos levantamos, desayunamos y nos cambiamos para jugar con agua y aunque estaba fría los juegos estuvieron muy divertidos; no dejábamos de reír. Después nos bañamos, nos cambiamos y fuimos a comer hamburguesas con papas que nos parecieron deliciosas.
Para despedirnos, buscamos un tesoro de monedas de chocolate. Llegó la hora de regresar, subimos al camión y durante el camino vimos una película. Todos estábamos cansados pero muy felices. ¡Ojalá que pronto se vuelva a repetir esta historia!.
Alumnos de segundo